Reparadores de Palabras
Invisibles, paseaban por las ciudades con sus lupas y sus trompetillas y, cuando veían o escuchaban letras que no estaban en su sitio, se acercaban y, de forma imperceptible, las arreglaban.
Su pasión, la perfección. Su profesión, Reparadores de Palabras.
Notas - 2 notas
Una profesión magnífica, señor Ocre, la de reparador de palabras.
Gracias.
Y poco reconocida